El conocimiento es un árbol.
A diferencia de otras herramientas educativas de materias específicas, ayudamos a las personas a comprender los fundamentos de cada área de interés. Lo sabemos antes de poder estudiar las hojas; hay que entender cuál es la raíz y cómo funciona.
Esperamos desafiar a las personas a ampliar su visión del mundo y ver el conocimiento como un árbol con ramas para la física, los estudios sociales, la biología, la literatura, el lenguaje, la psicología, las matemáticas y más. Conectadas, cada disciplina se vuelve más fácil y emocionante de aprender cuando uno puede correlacionar lo que está sucediendo en su viaje de aprendizaje continuo.